La Fibromialgia (FM) es una enfermedad de etiología desconocida que se caracteriza por la presencia de dolor crónico generalizado, que el paciente localiza en el aparato locomotor. En los últimos años, la FM ha ido adquiriendo cada vez mayor importancia hasta convertirse en la actualidad en un problema de salud pública de primer orden, por lo que el Día 12 de mayo se ha declarado Día Mundial de la lucha contra la enfermedad. Aunque el dolor es la principal queja, suelen coexistir una diversidad de síntomas físicos, funcionales y psicológicos que afectan negativamente a diferentes esferas de la vida del paciente, como por ejemplo, trastornos del sueño y rigidez muscular en la mañana, déficits cognitivos, fatiga, intestino irritable y alteraciones emocionales.
Actualmente en el estudio de su etiología y patogenia se plantea un modelo biopsicosocial compuesto por diferentes variables que interactúan en la predisposición, desencadenamiento y perpetuación del cuadro. Entre las variables psicosociales, la existencia de acontecimientos emocionales traumáticos en la infancia y primera adolescencia ha sido analizada en varios estudios y este tipo de acontecimientos son descritos con mayor frecuencia en pacientes con FM que en los grupos control.
La prevalencia de FM en nuestro país ronda el 2,5% de la población adulta. Aunque no se trata de una enfermedad degenerativa, la intensidad de los síntomas genera una gran limitación en la calidad de vida de estos pacientes. Existe además un problema de incomprensión por parte de la sociedad, los familiares y en ocasiones por parte de los propios profesionales ya que todavía nos es difícil entender que sin la existencia de una lesión orgánica detectable, se puedan padecer síntomas físicos tan intensos; en muchas ocasiones se simplifica el problema achacando todo el cuadro a problemas psicológicos (que son importantísimos en la patogenia y pronóstico de la enfermedad pero no son la única causa).
Tratamiento
Dentro de los tratamientos farmacológicos, existen evidencias a favor de algunos antidepresivos como la duloxetina y los estabilizadores de membrana como la pregabalina. Actualmente se recomienda evitar los opioides. Se ha demostrado el beneficio de algunas técnicas psicoterapeúticas, sobre todo si existen trastornos del ánimo o de ansiedad asociados.
Otra parte fundamental del tratamiento son las medidas higiénico dietéticas que son igual de importantes que el resto de tratamientos. Entre ellas podemos destacar la higiene del sueño, el ejercicio físico regular…etc. Lógicamente, el abordaje de la enfermedad debe de ser coordinado y multidisciplinar.
La Fibromialgia en el Hospital Universitario Infanta Cristina
Desde el año 2009, en el Hospital Universitario Infanta Cristina, existe una consulta de patología médica funcional, adscrita al Servicio de Medicina Interna. En ella se tratan diferentes tipos de trastornos por somatización. Una parte importante de estos pacientes padecen Fibromialgia. Cada año se valoran unos 40-50 casos nuevos de esta enfermedad en la consulta, donde se realiza un abordaje diagnóstico y terapéutico global, evaluando y actuando sobre los aspectos orgánicos, psicológicos y sociales del paciente. Con este abordaje se obtiene alguna mejoría clínica en el 60% de los casos.
En esta consulta se están realizando varios estudios de investigación en relación con la influencia de los factores emocionales en la enfermedad, tanto desde el punto de vista pronóstico como terapéutico. Además existe un contacto y colaboración estrechos con la Asociación de Fibromialgia de Parla (Fibroparla).